En la asamblea del pasado martes no se votó en urna oficialmente nada.
En vista de que la asamblea se estaba alargando excesivamente respecto al horario previsto y consecuentemente acercándose peligrosamente al límite del corte de clases (16.00 h). Fueron muchos los estudiantes que preocupados por no poder ejercer su derecho al voto y ante la imposibilidad de prolongar su presencia en la asamblea más allá de la 16 horas, solicitaron abrir las urnas antes del fin de la asamblea.
Esta solución no era viable por lo que algunos estudiantes propusieron la presentación de votos anticipados, algo que no está recogido por las normas de la Universidad en lo referido al desarrollo de asambleas (un vacío legal). Tras consultarlo con la Subdirectora de Ordenación Académica y constatar que no había personal de secretaría en la Escuela se decidió recoger votos adelantados dentro de sobres firmados y autentificados para su posterior inclusión en urna una vez abierta la mesa electoral y comprobado que no habían ejercido su derecho a votar durante el desarrollo de la votación.
Por lo que debe quedar claro y así se repitió hasta la saciedad, que los votos no eran válidos hasta que no se extrayeran del sobre para ser introducidos junto a los demás votos en las urnas. Y en el caso de que se decidiese no llevar a cabo la votación los votos no se abrirían y serían destruidos junto con las listas de electores.
Como ese fue el caso, se procedío a la destrucción pública tanto de las listas como de los sobres que contenían a los votos mediante una destructora de papel.
En vista de que la asamblea se estaba alargando excesivamente respecto al horario previsto y consecuentemente acercándose peligrosamente al límite del corte de clases (16.00 h). Fueron muchos los estudiantes que preocupados por no poder ejercer su derecho al voto y ante la imposibilidad de prolongar su presencia en la asamblea más allá de la 16 horas, solicitaron abrir las urnas antes del fin de la asamblea.
Esta solución no era viable por lo que algunos estudiantes propusieron la presentación de votos anticipados, algo que no está recogido por las normas de la Universidad en lo referido al desarrollo de asambleas (un vacío legal). Tras consultarlo con la Subdirectora de Ordenación Académica y constatar que no había personal de secretaría en la Escuela se decidió recoger votos adelantados dentro de sobres firmados y autentificados para su posterior inclusión en urna una vez abierta la mesa electoral y comprobado que no habían ejercido su derecho a votar durante el desarrollo de la votación.
Por lo que debe quedar claro y así se repitió hasta la saciedad, que los votos no eran válidos hasta que no se extrayeran del sobre para ser introducidos junto a los demás votos en las urnas. Y en el caso de que se decidiese no llevar a cabo la votación los votos no se abrirían y serían destruidos junto con las listas de electores.
Como ese fue el caso, se procedío a la destrucción pública tanto de las listas como de los sobres que contenían a los votos mediante una destructora de papel.
NO HUBO VOTACIÓN
lunes, 30 de noviembre de 2009 |
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